“Dicen que los viajes ensanchan las ideas, pero para esto hay que tener ideas”. (G. K. Chesterton)
Hoy tenía que haber sido el primer
día de pedaleo, pero no ha podido ser, en la que iba a ser la última salida en
bicicleta a media tarde de ayer para acompañar a Carmen en su entrenamiento, la
maneta del cambio trasero ha dejado de funcionar.
Así que esta mañana hemos puesto
rumbo hacia el taller de bicicletas para que intentarán solucionar el problema
y lo han conseguido, al medio día ya tenia la bicicleta otra vez en casa, para
probarla dentro de un rato y si todo sigue como debería de seguir, mañana nos
pondremos en marcha.
No me atrevo a decir que haya tenido
mala suerte ya que, de haber sucedido dentro de unos días, pues estaba claro
que se iba a estropear pues se había perdido un tornillo se sujeción de un
protector del cable y era cuestión de tiempo que terminará por soltarse del
todo, así que puedo decir que muy bien, he “perdido” un día, pero he
solucionado un problema que me hubiera causado muchos más inconvenientes.
Mirar ahora hacia atrás, para ver
si voy a poder seguir con el programa establecido, no parece que me tenga que
llevar a ningún sitio. La cuestión es dirigir mi mirada hacia delante, como si
nada le hubiera sucedido a la bicicleta y tener la esperanza que ahora está en
mejores condiciones para llevarme a Roma.
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