miércoles, 31 de mayo de 2023

30 de mayo de 2023. Altea --- Santa Pola.

 “Nuestra perfección no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en hacer perfecto lo ordinario” – San Gabriel de la Dolorosa.

Altea --- Santa Pola.

Distancia: 85,45 km.

Media: 14,59 km/h.

Altura: 596 m.

Segundo día, y ya empieza a ser importante la prudencia, hoy por ejemplo nos hemos descuidado y tanto admirar playas y paseos maritimos nos hemos pasado de kilómetros, hay que ir con cuidado y no olvidarnos de las precauciones que tomamos ayer al comenzar a pedalear. La prudencia es un valor que todos valoramos o por lo menos una inmensa mayoría, y también es apreciado por la sociedad, aunque tengo que decir, que siempre hay alguien que defendiendo una supuesta “naturalidad” o “espontaneidad” termina por despreciarla.

Pero si lo pensamos un poco veremos que hay que ponerla no como un valor sino como una virtud. Porque si una virtud es “la disposición habitual y firme a hacer el bien”, la prudencia es, sin duda, la madre de todas ellas.

Los ciclo-viajeros la tenemos en una gran estima pues es la mejor ayuda con la que contamos para discernir, es decir, para distinguir lo que sucede, dentro y fuera de nosotros, y poder elegir lo que más nos ira bien.

Es verdad que, con la excusa de no precipitarse, pueden colarse, bajo apariencia de prudencia, la timidez o el miedo que nos hacen dilatar indefinidamente determinadas decisiones. También, bajo el título de prudencia, pueden asomar la doblez y el disimulo, haciendo que nos pongamos de perfil ante los retos que la vida nos presenta.

Pero, en estas situaciones, nos suelen saltar las alarmas, ya que sabemos lo que es la prudencia, pues la hemos aprendido e interiorizado a base de ser, precisamente, imprudentes en muchas ocasiones durante un viaje: ¿quién no ha metido la pata varias veces durante un viaje, y se ha propuesto ser más prudente en el próximo? Esto nos sucederá de la noche a la mañana: exige esforzarse en ser prudente, examinar cómo he andado de prudencia (o imprudencia) hoy, buscar dónde y cómo puedo ser más prudente mañana, aprender las “formas” de la prudencia, que cambian, porque lo que es prudente en determinadas situaciones, es completamente imprudente en otras.

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

martes, 30 de mayo de 2023

29/05/23. Pego - Altea.

     “Nuestra perfección no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en hacer perfecto lo ordinario” – San Gabriel de la Dolorosa.

Pego – Altea.

Distancia: 61 km.

Media: 15,15 km/h.

Altura: 463 m.

Ya estamos en marcha, nuestro cuentakilómetros ya ha empezado a marcar, y nuestra ilusión de dar una vuelta completa a la península Ibérica se está haciendo realidad.

Hoy hemos llegado a Altea, un recorrido de sobra conocido, como suele suceder siempre que salimos de casa, los dos primeros días, elijamos la dirección que elijamos es como pasear por nuestro pasillo.  

A partir de hoy se van a suceder unos días donde te das cuenta del valor de lo cotidiano. El ruido de la lavadora; del extractor mientras cocinas; recorrer las calles de sobra conocidas; leer en mi sillón que ya tiene mi forma; el café con mis amigos en la que la charla deriva hacia lo de siempre, con ese tono burlón en el que sabemos de estamos a salvo...

En todas esas acciones diarias siento que está lo que me hace ser quien soy. Esas sencillas elecciones del día a día, me van, sin darme cuenta, dando forma. Esas cosas, esos sitios, esas personas que vemos cada día, esos amigos que conscientemente hemos elegido con cuidado. Todo eso, tan sencillo, sin darnos cuenta, responde a esas preguntas fundamentales: ¿dónde? ¿cómo? ¿con quién?

Te das cuenta en estos primeros días de viaje cuánta razón tiene san Gabriel de la Dolorosa cuando nos dice que: “Nuestra perfección no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en hacer perfecto lo ordinario”

Lo sabemos, los ciclo-viajeros lo hemos entendido, siempre nos vamos de viaje para volver a lo de siempre y poderlo ver como algo nuevo.

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

lunes, 29 de mayo de 2023

0...

 “El hombre no haría nada si esperara hasta que lo pudiera hacer tan bien, que nadie le encontrara defectos.” (John Henry Newman.)  

Dentro de pocas horas, cuando el sol ya nos esté calentando, empezaré a recorrer el perímetro de la península Ibérica y, puede dar la impresión de que esté hecho solo sea para unos pocos valientes, inconscientes aventureros, capaces de realizar esta clase de proezas.

Si pensamos de esa forma, va calando en nosotros la idea de que este tipo de viajes no es para nosotros y acabamos no dando el primer paso y nos apeamos de empezar a planearlo. Sin embargo, este no es un camino de grandes saltos, de un salto al vacío, sino que hay que dar pequeños saltos hasta llegar al día en que nos tocará comenzarlo. Claro que cada salto conlleva incertidumbres y pide grandes dosis de confianza, pero reconociendo que sabemos bien lo que vamos a hacer se pueden dar. Salvada la idea del salto al vacío, todavía nos queda salvar las distancias.

Cada pequeño paso hacia nuestro viaje debe ir acompasado a nuestro ritmo, la dificultad del primer paso viene muchas veces por querer adelantarnos a los acontecimientos, ya que el futuro nos abruma y ansía. Sin embargo, hay que dar solo el siguiente paso posible; ni uno más, pero tampoco menos. Mi experiencia es no dar todos los pasos de golpe: el primero y esencial vino con un fin de semana, pero después seguirían otros, cada uno a su tiempo, en los que vas capacitándote a cada paso posible hasta atreverte con una semana. Cada vez exigiéndonos un poco y capacitando siempre, y esta es una forma de atrevernos a dar ese primer paso que haga posible que empecemos un largo viaje.

Hay un dicho que dice que la vuelta al mundo se da con un solo paso, porque después de uno, siempre puedes dar otro. Por eso, no conviene abrumarse por lo mucho que tendremos que andar, por los vericuetos que a veces nos tocará recorrer, o por las cotas que tendremos que alcanzar. Preocupémonos solo de dar el primer paso, el único necesario para subirse a una bicicleta, y dejemos los grandes saltos para los más avezados, porque para nosotros un paso más siempre es posible.

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

domingo, 28 de mayo de 2023

1...

   Nuestra perfección no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en hacer perfecto lo ordinario” – San Gabriel de la Dolorosa.

El uno, ¡por fin el uno!, mañana es el día. Todo está ya preparado y da la impresión de que esta todo controlado, creo no engañar a nadie si digo que: “todo está listo” o la famosa frase de Cesar; “la suerte está echada”.

No será difícil que me pase el día de hoy haciendo comparaciones con los anteriores viajes, ya sé que sirven de muy poco pues cada viaje es una historia y cada año las circunstancias pueden ser distintas, sin embargo, se suelen hacer.

El comparar en sí no es algo malo. De hecho, es algo humano. La comparación me puede llevar en este caso a la admiración y el deseo de emular a los grandes viajeros, lo que está bien. Sin embargo, se puede volver un peligro si pongo en valor mi viaje en comparación con los demás.

Cuando nos liamos con las comparaciones y el mal interpretamos nos encontramos con dos formas de afrontarlas. Por una vamos los que solemos pensar que todo el mundo está mejor que nosotros. “Él es mucho más inteligente que yo”, “ella sí que sabe lo que hace”, “él es tan fuerte”.

Por la otra vamos los que exaltamos nuestras propias cualidades y reducimos las de los demás. Los que vamos por esta solemos pensar, “¿quién como yo?” y enfocamos nuestra vida solo en nuestros méritos.

Vivir de comparación en comparación nos da un concepto distorsionado de la realidad. Nos concentramos en lo que no tenemos e idealizamos a los demás o bien exageramos nuestras propias virtudes y minimizamos las de los otros.

Lo mejor, es mirar como tengo planteado mi viaje, cómo lo he preparado y no solamente como lo hubiera deseado. Estoy seguro de que tengo algo que he planeado y realizaré bien, pero también tengo miedos e inseguridades.

Hay que entender que en cada viaje que observamos hay mucho más de lo que vemos por nuestros medios, todos los viajeros cometen aciertos y errores. Tenemos que aceptar nuestra realidad, las exigencias que le ponemos no se van a alcanzar ni por mis méritos ni por mis juicios que tantas veces van a ser errados. Se alcanzarán, o más bien, se sentirán cuando conociendo bien todo lo que somos, nos repitamos, “soy incomparable”, “mi viaje es incomparable”.

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

sábado, 27 de mayo de 2023

2...

¡¡¡Buenos días!!! 

Nuestra perfección no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en hacer perfecto lo ordinario” – San Gabriel de la Dolorosa.

En esta corta pero intensa cuesta atrás, nos encontramos con el dos, ya estamos cerca, pero no tanto como para nuestros nervios no nos dejen dormir, así que continuo tranquilamente preparándome, intentando ir haciendo las cosas bien. 

Hoy en día es fácil caer en la tentación de pretender quedar bien más que hacer el bien. Estamos en una sociedad que tiene mucho de sentimentalismo, de emociones, nos gustan los “likes”; lo que es sólido nos resulta desagradable, o sea, no es rentable emocionalmente. Lo vemos continuamente en muchos padres, que para que sus hijos les dejen tranquilos, para tener un poco de paz, ceden en lo que no se debe; dimiten de su trabajo de liderazgo, no procuran el bien de los suyos y anteponen su comodidad. Si buscamos en los políticos vemos que lo que les interesa es la popularidad, ganar votos es el único motivo de sus acciones y promesas.

De lo que se trata al preparar un viaje es que todo sea lo más consistente posible, que lo que sabemos que funciona, utilizarlo, lo que conocemos que nos puede fallar, intentar hacerle los retoques necesarios para que nos falle lo menos posible. Empeñarse en algunas cuestiones sin estudiarlas nos puede estropear algunos días. No hay que ser un fanático de casi nada.

Vemos a nuestro alrededor que hay algunos fanatismos que provocan un rechazo de lo consistente, de la verdad. Hemos visto que las rigideces, la intransigencia, el moralismo van en deterioro de la paz, de la libertad. No nos gustan las posturas “talibanes”, inquisitivas. Pero la ausencia de verdad, de convicciones firmes, de valores, tampoco favorecen a la persona, al avance social. No puede haber progreso auténtico sin verdad, sería un falso desarrollo, una mera ilusión.

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

viernes, 26 de mayo de 2023

3...

 Nuestra perfección no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en hacer perfecto lo ordinario” – San Gabriel de la Dolorosa.

Ya estamos en nuestra cuenta atrás con el tres, cada día un poco más cerca del cero y cada día todo un poco más en su sitio, como debe ser. Aunque continuamos haciéndonos preguntas vemos que no tenemos tanto tiempo para buscar las respuestas adecuadas, por lo que nos apresuramos a buscar la respuesta que a primera vista nos parece más sencilla.

Me paso ayer, me surgió una pregunta preguntas cuya respuesta a primera vista parecía sencilla y lógica, y sin embargo al reflexionarla un poco me dejo la sensación de que no estaba tan clara e incluso que estaba equivocado. Me sucedió con la pregunta: ¿puede el amor ser malo? La primera impresión es que contestar que “no” es la más acertada y que contestar que “si” me cuesta, no fue mi primera reacción.

No hay duda de que el amor es una fuerza increíblemente poderosa. Por amor somos capaces de casi todo. Por eso, existe en el amor una bendición y una maldición. Por amor puedo dar mi vida y por amor puedo destruir una vida. Por lo tanto: “El amor puede ser malo”.

Si miro esta cuestión como cristiano debería de tener pocas dudas, pues ejemplos tengo de sobra, sin ir más lejos me encuentro con David que amaba a Betsabé, la mujer de Urías. La amaba muchísimo. La amaba tanto que rompió su matrimonio, engaño a su marido Urías y lo envió a la muerte. Ese amor fue pecado, entre otras razones, porque causó daño al marido de Betsabé. Pero no sólo por eso. Un acto pecaminoso lo es, aunque no parezca causar perjuicio a otros.

No voy a entrar ahora a aclarar el punto de vista cristiano sobre las relaciones entre las parejas, y que existen también efectos positivos en otra clase de relaciones, puesto que hay aspectos positivos en toda acción humana. Pero no toda acción es capaz de hacer visible su sentido cristiano y, en consecuencia, no toda acción es digna de ser reconocida como buena.

En fin, el tema del amor es más complicado de lo que parece a primera vista.

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

jueves, 25 de mayo de 2023

4...

 Nuestra perfección no consiste en hacer cosas extraordinarias sino en hacer perfecto lo ordinario” – San Gabriel de la Dolorosa.

Ha empezado la cuenta atras, a cuatro días del comienzo de este nuevo viaje en el que recorreremos el perimetro de la peninsula Iberica y, aunque no creo que vaya a llover mucho si que lo esta haciendo esta semana, y mucho, lo que me ha permitido recordarme que debia impermeabilizar la tienda de campaña, después de cinco años en los que la he utilizado muchos días, haciendo una cuenta por encima, habré superado los trescientos, han sido muchas noches en las que no he tenido ningún problema, pero he querido asegurar.

Falta ya muy poco para empezar a pedalear y me encuentro en unos días de frenesí, de nerviosismo, de aceleraciones autoimpuestas en una situación de la que me resulta imposible escapar. Me pregunto si realmente quiero. Maldigo, siempre y sospechosamente, el yugo de la velocidad, de las prisas, de los nervios. A la vez, sin pararme a pensar, disfruto de todas las ventajas que me permiten hacerlo. Disfruto de la tecnología que me da la oportunidad de no perder ni un segundo de mi preciado y escaso tiempo en cuestiones que se pueden considerar secundarias.

En estos días se tiene la sensación de querer acumular tiempo, como si quisiéramos almacenarlo para utilizarlo para hacer frente a los verdaderos problemas que nos vayan apareciendo.

Sin embargo, sabemos que esto no es así. No acumulamos segundos para las cuestiones que de verdad importan, sino para las experiencias del momento, efímeras que se esfuman a igual velocidad que hacemos un cambio de pantalla en el móvil.

No voy a caer en la tentación, ahora, de juzgar lo bueno o lo malo de esta forma de ver la vida, pues en algunos casos parece que no hay alternativa, creo que debemos valorarlo por sus consecuencias. Una de ellas es que nos hace incapaces para realidades esenciales de la vida que necesitan tiempo, a veces mucho tiempo.

Necesitamos saber qué se nos mueve por dentro, qué discursos elaboro en mi interior. Clarificar sentimientos, emociones, razones. Revisitar los acontecimientos que tenemos alrededor. Y para eso se necesita tiempo y tranquilidad, una tarea en la que hay que ponerse, tan pronto como se pueda.

Con esto del tiempo vivimos una paradoja. Queremos lo que solo se consigue con tiempos largos. A la vez nos negamos a invertir el tiempo para conseguirlo. Solidez e inmediatez, por más malabarismos que hagamos, se excluyen. Hablamos de la meta sin querer asumir los riesgos, y también las alegrías, parciales del camino. No obstante, por joven que seas, estoy seguro de que ya has intuido alguna vez que a veces, para llegar más lejos, solo tienes que parar.

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

lunes, 22 de mayo de 2023

"Larga es la espera..."

 “El hombre ha de tener la suficiente fe en sí mismo para emprender aventuras, y dudar de sí mismo lo suficiente para disfrutarlas (G. K. Chesterton)


Una vez más empezamos la cuenta atrás, son ya muy pocos los días que faltan para empezar a recorrer el perímetro de la península Ibérica. Ya se acerca ese momento que con tanta ansia esperamos; un nuevo viaje está a la vuelta de la esquina. Ha pasado ya más de un año desde que empezamos el viaje al Nordkapp y llega el momento de empezar otro.

Pero antes de todo viaje esta la preparación, de mirar hacia atrás y ver cómo llegamos a estos días, ver cómo nos ha tratado la vida estos meses y cómo nos encontramos para estar pedaleando al menos tres meses seguidos.

Es un tiempo en el que esperamos algo bueno que llega. Pero, sobre todo, es un tiempo de esperanza; de creer en todo lo bueno que nos da la vida y de darnos cuenta de que todo eso lo vamos a celebrar en los próximos meses y a poner a disposición del viaje.

Ya esta todo el material esparcido por el comedor, las alforjas listas para recibir todo el equipamiento, la bicicleta lista y engalanada para viajar y, listos para reconocer la verdad de la letra esa canción de Rumba Tres que nos decía:

“Larga es la espera, pa quien espera

pero más larga es la espera

sin saber lo que se espera.”  

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

viernes, 19 de mayo de 2023

¡¡¡Feliz viernes!!!

 ¡¡¡Buenos días!!!

Como decía el otro día no se puede decir contundentemente que el mundo cristiano en un momento dado sea claramente mejor que el mundo no cristiano. Uno de los motivos es que según podemos ver en el mundo actual las cosas son mucho más complicadas. El mundo no esta compuesto de cristianos al cien por cien y no cristianos al cien por cien.

Nos podemos encontrar con muchas personas que están dejando poco a poco de ser cristianas pero aún se pueden llamar a sí mismas por ese nombre. Hay también otras personas que poco a poco se están convirtiendo al cristianismo aunque aún no se llamen a sí mismos cristianos. Por otro lado nos encontramos con personas que no aceptan todo lo que nos dice el cristianismo, pero que se sienten atraídos por Jesús. También nos podemos encontrar con personas de otras religiones que de alguna manera se inclinan a seguir con más fuerza aquellas partes de su religión que están de acuerdo con el cristianismo, y que sin saberlo pertenecen a Cristo. Y siempre, por supuesto, hay una gran cantidad de personas que se sienten confusas y tienen una cantidad de creencias inconsistentes y mezcladas entre sí.

Por lo tanto, no sirve de mucho formar juicios sobre los cristianos y los no cristianos en masa. Cuando comparamos los cristianos en general con los no cristianos en general, normalmente no estamos pensando en personas reales que conozcamos, sino en una o dos vagas ideas que podemos haber conseguido de los periódicos y de las novelas.

Si queremos comparar al mal cristiano con el buen ateo tendremos que pensar en dos personas autenticas que conozcamos en realidad. A menos que aclaremos las cosas en ese aspecto, solo estaremos perdiendo el tiempo.

jueves, 18 de mayo de 2023

14/05/23. Castelló d'Empúries --- Castelló d'Empúries.

 “El hombre ha de tener la suficiente fe en sí mismo para emprender aventuras, y dudar de sí mismo lo suficiente para disfrutarlas (G. K. Chesterton)

Castelló d'Empúries --- Castelló d'Empúries

Distancia: 52 km.

Media: 13,9 km/h.

Altura subida: 630 metros. 

Hemos vuelto a España para huir del fuerte viento que soplaba en Francia y realizar una ruta por Cadaqués y Roses, y es que el viento es posiblemente el peor enemigo del ciclista.

Creo que disfrutar del viento, sobre todo cuando es en contra, es uno de objetivos más difíciles de conseguir para un ciclo-viajero. Ya sé que, en alguna ocasión, cuando os habréis encontrado con esos momentos, habéis pensado en: “voy a vivir el momento presente y a disfrutarlo”, pero pocas veces lo habréis conseguido, al menos yo solo lo he conseguido cuando sabía que a los pocos kilómetros iba a dar la vuelta.

Evidentemente, no tengo esa fuerza mental para disfrutar del viento en contra. Recuerdo que en alguna ocasión me encontré en esa situación en la que no podía cambiar de dirección y me salió más de una maldición, menos mal que estaba solo. Pero no pude por menos de pensar: “después de tantos años de ciclo-viajero, ¿a qué viene este insulto?

¿Cómo es que no pude controlarme?, mandar sobre mi voluntad es relativamente fácil, en cambio mandar sobre mis sentimientos es más difícil.  

Tenemos claro que durante un viaje van a existir momentos malos y momentos buenos, pero a veces nos centramos en lo que no podemos y nos olvidamos de lo que podemos. Si somos sinceros, a veces dedicamos muchos momentos a fijarnos en las limitaciones y dificultades de muchas situaciones del día a día y poco a poco vamos limitando los podemos que están en nuestra mano.

Es cierto que quizás no podemos solucionar el mundo, ni vencer a ese viento en contra, ni evitar muchas injusticias… pero seguro que en medio de todas estas situaciones hay algún podemos que esté en nuestras manos, algo tan sencillo como una palabra, un gesto, un silencio, una llamada, una sonrisa, un abrazo, un rato de conversación, un agradecimiento, una mirada cómplice, un wasap, un café…

Nadie es capaz de solucionar todos los problemas que se presentan cada día, pero nunca nos podemos centrar en lo que no se puede, sino que hay que poner nuestra mirada en lo que si podemos hacer.  

Y yo, y tú, y nosotros ¿qué podemos...?

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

miércoles, 17 de mayo de 2023

¡¡¡miércoles!!! ¡¡¡¡Buenos días!!!

 ¡¡¡Buenos días!!!

Me preguntaba el otro día una amiga mientras nos tomábamos un café que, si el cristianismo es verdad, ¿por qué no son todos los cristianos mejores que aquellos que no son cristianos? Detrás de esta pregunta hay una cuestión que es razonable y en parte algo que no es razonable en absoluto.

La cuestión que parece razonable es sin duda la que nos viene a decir que, si al convertirse en cristiano no se produce ninguna mejora en las acciones de una persona, si sigue siendo tan orgulloso o despreciable o envidioso o ambicioso de cómo era antes, entonces podemos pensar que su “conversión” fue seguramente imaginaria. Decir, que soy cristiano porque tengo buenos sentimientos, nuevas perspectivas, un mayor interés por la religión no significan nada a menos que haga que mi comportamiento sea mejor. En ese sentido, todo el mundo tiene razón al juzgar al cristianismo por sus resultados. Cuando un cristiano se comporta mal, o deja de comportarse bien, hace que el cristianismo resulte increíble para el mundo no cristiano.

Sin embargo, hay otra forma de exigir resultados en la que el mundo puede ser bastante ilógico. Veamos, el mundo puede pensar que antes de que se crea en el cristianismo, se vea el mundo entero dividido limpiamente en dos campos -el cristiano y el no cristiano- y que todas las personas del primer campo en cualquier momento dado sean claramente mejor que la gente del segundo. Esto es irrazonable por varios motivos.

A ver si mañana puedo dar algunos motivos.

martes, 16 de mayo de 2023

13/05/23. Narbonne --- - Sainte Marie la Mer

 “El hombre ha de tener la suficiente fe en sí mismo para emprender aventuras, y dudar de sí mismo lo suficiente para disfrutarlas (G. K. Chesterton)


Narbonne --- - Sainte Marie la Mer

Distancia: 78 km.

Media: 14,30 km/h.

Altura subida: 554 metros.

Volvemos al lugar de partida de este pequeño viaje, lo hemos hecho siguiendo otros carriles bici, esta vez entre las marismas y las montañas, más duro sin duda, pero con unas vistas que bien merecen el esfuerzo de subir y bajar constantemente las interminables colinas.

Cuando viajamos, y sobre todo cuando lo hacemos en bicicleta, por lo general vamos pegados a un mapa, en el que nuestra visión sobre él nos muestra el horizonte por donde vamos a movernos. Sin el mapa no somos casi nada, pero el mapa, ese pequeño papel, es un seguro de vida, nos permite encontrar el camino que queremos recorrer, nos confirma si nuestro destino está lejos o cerca, nos asegura si vamos en la dirección correcta o nos pone en alerta si vamos en la contraria.

Sin embargo, algunos ciclo-viajeros tienen la suerte de tener un guía y, especialmente si es un amigo, entonces todo cambia. Nos fiamos de esa persona que conoce los caminos, nos ponemos en sus manos sin dudar de que nos llevará a los mejores sitios, a los más interesantes, a donde queríamos ir. Nos fiamos de su experiencia. Él ya ha recorrido ese camino primero y por eso nosotros ahora lo seguimos. Pero cuando llegamos a los esos lugares, ahí nosotros volvemos a tener el papel principal, el guía nos explica, nos da datos, pero la experiencia de ver las cosas, de descubrir los detalles y grabarlos en la retina, eso solo lo puedo hacer yo.

Cuando volvemos a un lugar donde ya hemos estado antes somos un poco menos turista. Ese lugar no es nuestra casa, pero empiezas a sentirte en ella; ya no nos guía el mapa, y tal vez tampoco el amigo que nos sirvió de guía, sino que son nuestros recuerdos y nuestras experiencias allí donde nos ocurrió algo lo que sirve. Sin embargo, no nos quedamos ahí, nos aventuramos a descubrir nuevos lugares, nuevas rutas, hemos perdido el miedo a extraviarnos, porque sabemos que a final controlamos la zona.

Y entonces llega ese último momento, en el cual de turista te acabas convirtiendo en guía, y ahora eres tú el mapa andante de amigos o familiares que quieren conocer aquel sitio del que tanto les has hablado. Y como guía disfrutas contando aquello que ves, y lo haces desde tu perspectiva, desde tus emociones, pasiones... no puedes dejar de transmitir aquello que llevas dentro, para que el otro pueda empezar a disfrutarlo a su propia manera.

Y digo yo, ¿No será que en el camino del ciclo-viajero somos a veces turistas y a veces guías?

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

lunes, 15 de mayo de 2023

12 de mayo de 2022. Narbonne --- Narbonne

 “El hombre ha de tener la suficiente fe en sí mismo para emprender aventuras, y dudar de sí mismo lo suficiente para disfrutarlas (G. K. Chesterton)

Narbonne --- Narbonne

Distancia: 65 km.

Media: 12,34 km/h.

Altura subida: 308 metros.



Nuestro objetivo de hoy no era volver al lugar de comienzo, pero el fuerte viento en contra nos ha hecho cambiar de opinión y volver sobre nuestros pasos, en realidad hemos elegido otro camino para volver al mismo camping.

La cuestión es que no podemos luchar todo el tiempo ni en todas las causas. Hay batallas que merecen la pena y otras que no. El fuerte viento, que por cierto va a durar varios días, no ha hecho cambiar nuestros planes. Hay en la vida y en los viajes algunos objetivos y algunas historias que claman para que las afrontemos y que quizás es mejor asumir, y en estos casos hay que pelear hasta donde haga falta y otras como en esta ocasión donde no hacia falta embestir contra ese muro insalvable que se convierte el viento en contra para un ciclista.  

A veces todas estas situaciones tienen que ver con nuestros deseos para cada viaje o como suelo decir muchas como en cada situación en nuestra vida: ¿qué tal los deseos? ¿tienes deseos?

Efectivamente, los deseos son importantes porque nos dan muchas pistas para resolver situaciones complicadas. Deseo aquel viaje que no tengo, deseo aquello que me falta. El deseo no son las ganas del momento, no. El deseo ocupa un lugar importante en nuestra relación con todo lo que nos rodea. Actúa, en la mayoría de las veces, como un GPS. Nos indica si estoy en movimiento o, por el contrario, si me he estancado. Además, cuando un viaje tiene un fuerte deseo detrás, cuando un deseo es auténtico no se descompone ante las dificultades o ante el fracaso, sino que se vuelve más fuerte, vibra con más potencia en mí.

A lo largo de mi vida, me he encontrado con muchos deseos que se han convertido en nada. Viajes que no pasan de un deseo, que no los pones “negro sobre blanco”, no se mueven, están estancados. En muchas ocasiones sufrimos porque no encontramos ese viaje que hará que saltemos del sillón y se convierta en un deseo tan profundo que ya lo vamos a llevar en nuestro interior hasta que lo alcancemos.

Cuando me concentro, y escucho ese deseo más profundo, no me escucho a mi mismo, escucho otra voz en mi interior que intenta sintonizar conmigo para mostrarme un camino más fácil, siempre hacia adelante. Un camino no solo me ayuda a conseguir ese deseo, sino que me habla de libertad, autenticidad y felicidad. Y ahora te pregunto a ti: ¿qué tal los deseos?

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

domingo, 14 de mayo de 2023

11 de mayo de 2022. Sainte Marie la Mer, Proche de Perpignan – Narbonne.

“Los cuentos de hadas superan la realidad no porque nos digan que los dragones existen, sino porque nos dicen que pueden ser vencidos” (G. K. Chesterton.)

Sainte Marie la Mer, Proche de Perpignan – Narbonne.

DISTANCIA: 64 KM.

MEDIA: 11,35 KM/H

ALTURA SUBIDA: 283 METROS.

 Hoy hemos dejado aparcado el coche y hemos empezado un viaje de varios días con las bicicletas y todo el material de viaje. Recordaba mientras cargaba la bicicleta esos mensajes “buenistas” del tipo de “quien la sigue, la consigue” o “todo esfuerzo tiene su recompensa”.

 Resulta que, pese a no dudar de su trasfondo inocentemente esperanzador, se quedan un poco vacíos si los razonas un poco (porque creo que, si no vas a rascar, no puedes descubrir qué te pueden ofrecer). ¿Qué pasa si me esfuerzo y no consigo lo que quiero? ¿Qué pasa si me esfuerzo, pero lo que alcanzo no es ni de lejos mi sueño? ¿Qué narices es un sueño?

Creo que una de las premisas clave en todo proceso de aprendizaje que es la vida es asumir que no siempre querer es poder y que tampoco sin esfuerzo consiguiere siempre lo que quiero. Pero, una vez llegados hasta ahí, también tengo que aceptar que a veces, lo que considero que es un sueño puede estar lejos de lo que esperaba. Porque en ese camino de “conseguir”, voy dejando trocitos de “ideales” que me llevarán al punto de partida, pero jamás al punto de llegada. El problema es que si pongo demasiadas esperanzas en conseguir algo que espero que sea lo mejor del mundo, es bastante probable que termine decepcionando. Que me encuentre henchido de satisfacción dos minutos, pero profundamente desolado ante el resultado.

Por lo general las personas damos demasiada importancia a los “caprichos”, esos impulsos momentáneos, aunque a veces se alarguen en el tiempo, con las que nos obsesionamos y para las que creemos estar destinados, sin darnos cuenta de que lo que realmente pesa en la vida, nos dirige y nos sana el vivir no tiene mucho que ver con el objetivo. Tiene que ver sobre la manera en que enfocamos nuestras ganas, nuestras motivaciones y, al final, nuestras virtudes. Versa sobre la forma en que das vida a lo que sabes que hay en ti. Versa en cómo le pides para que te respalde, te colme de paz y sosiego en todo proceso de anhelo. Porque es bueno tener objetivos, pero no es bueno sólo tenerlos a ellos.

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

sábado, 13 de mayo de 2023

¡¡¡Buenos días!!! ¡Nos fuimos!

 Los cuentos de hadas superan la realidad no porque nos digan que los dragones existen, sino porque nos dicen que pueden ser vencidos” (G. K. Chesterton.


Como por arte de magia nos trasladamos al miércoles pasado, en concreto al 10 de mayo, para recordar como comenzamos una pequeña escapada con la bicicleta, cinco o seis días que deben servir para ultimar los preparativos para el viaje de este verano.

Creo que lo habré escrito en alguna ocasión, y es que un ciclo – viaje y la vida son como un camino, una peregrinación con muchas etapas. Y como ciclo-viajero son muchas las veces en las que toca volver a ponerse en marcha después de haber hecho un viaje. Ello siempre conlleva tener que hacer otra vez las alforjas y preparar la bicicleta. Momentos en los que aprovecho para hacer limpieza y deshacerme de cosas que llevo y que no he usado en el viaje anterior, momentos en los que vuelven a pasar por mis manos fotos, escritos y recuerdos que evocan a personas importantes de mi vida, experiencias vividas etc. Y al empaquetar, siempre tienes la sensación de estar colocando toda tu vida en las alforjas, a la espera de volver a recolocarlas al día siguiente de forma diferente.

Y es que, en el fondo, al hacer las alforjas y viajar, sea más lejos o más cerca, de unos pocos días o de algunos meses, siempre hay algo de nosotros que se muere, algo que se queda y algo que se va. Algo que muere, como las cosas que tiramos a la basura, puesto que para salir hacia un nuevo viaje es necesario de alguna manera romper con el lugar que nos cobijaba hasta el momento. Y esto es algo que ni las comunicaciones ni las redes sociales han podido solucionar. Algo que se queda, porque hay una serie de personas que paradójicamente permanecen a nuestro lado cuando nos marchamos. Son aquellas personas que nos han marcado, en las que hemos confiado y con las que mantendremos una relación más o menos frecuente, pero con la conciencia de que desde allí estarán con nosotros. Y algo que se va, que se viene con nosotros dentro del equipaje, como los regalos de despedida que se unen a nuestras pertenencias. Porque al marchar de un lugar, siempre nos llevamos con nosotros todas aquellas personas y experiencias que nos han marcado, haciéndonos crecer y madurar, cambiando nuestra manera de ser y de pensar.

Pedalear, salir, viajar, dejar, permanecer, morir… son verbos que hablan de experiencias fundamentales de la existencia, que nos hacen más humanos, y que en el fondo nos enseñan que en esta vida es tan importante saber decir hola, como aprender a decir adiós.

https://www.instagram.com/vicent1956/?hl=es

viernes, 12 de mayo de 2023

¡¡¡Buenos días!!!

 ¡¡¡Buenos días!!! 

Lo que no termine de aclarar ayer fue la diferencia entre leer a Aristóteles y seguir sus ideas y lo que significa leer a Cristo e intentar ser como Él.

La diferencia la encuentro en que Jesús no es un buen hombre que vivió hace mucho tiempo. Se trata de un Hombre vivo tan hombre como nosotros, y, es más, tan Dios como lo fue cuando creó el mundo, y que aparece y se pone en contacto con mi ser más íntimo, quita a mi yo natural y lo sustituye por la clase de Yo que Él tiene. Al principio, solo un poco, después por más tiempo hasta que si todo funciona bien me transforma en alguien diferente.

 Si esto nos llega a suceder, nos damos cuenta rápidamente de dos cosas: para empezar, me doy cuenta de que las cosas que hago mal me causan alarma, no por lo que he hecho sino por lo que soy. Es fácil que os parezca complicado, pero no lo es tanto. La mayoría de las cosas que hacemos mal las justificamos con que nos cogió por sorpresa o que no tuvimos tiempo de controlarnos, esto puede ser un atenuante, es verdad. Pero no hay duda de que lo que hacemos cuando nos cogen por sorpresa es la mejor evidencia de lo que somos.

Un ejemplo que leí hace días decía que si en una habitación hay ratones es más probable que los veamos si entramos de golpe. Pero esa entrada “de repente” no crea a los ratones. De la misma manera, nuestra intempestiva reacción ante algo, no nos convierte en una persona de mal carácter; solo demuestra el mal carácter que tengo. Los ratones están en la habitación, pero si entramos dando gritos y golpeando la puerta se habrán escondido antes de que encendamos la luz.

Aparentemente, los ratones de nuestro resentimiento siempre están allí, en la habitación de mi alma. Y esa habitación se encuentra fuera del alcance de mi voluntad consciente. Puedo, hasta un cierto punto, controlar mis actos, pero no tengo un control directo sobre mi temperamento.

Esto deja el tema muy abierto, ¿cómo puedo entonces conseguirlo?

jueves, 11 de mayo de 2023

¡¡¡Feliz jueves!!!

 ¡¡¡Buenos días!!! 

Decía ayer que depender solamente de los hombres nos puede salir mal, Y eso nos decepcionara. Las mejores personas se van a equivocar, van a cometer errores y todos van a morir.

Por supuesto que debemos estar agradecidos a todos los que nos han ayudado, hay que amarlos y también honrarlos. Pero nunca hay que poner toda nuestra fe en ninguna persona, aunque sea el más bueno y sabio de toda la tierra. Mirad, con la arena de la playa se pueden hacer maravillas, las vemos muchas veces en la playa, pero no debemos intentar construir nuestra casa sobre ella.

Es fácil que, durante estos últimos días, aunque lo haya intentado, no he explicado bien lo que se nos dice tantas veces a los cristianos; de que hemos “nacido de nuevo” o como “haciéndonos en Cristo” o diciéndonos que Jesús se está “formándose en nosotros”. Tal vez este equivocado en esas explicaciones y no sean las adecuadas, pero son a las que yo he podido llegar.

Lo que tengo claro, es que, hay que quitarse de la cabeza la idea de que lo que tienen que hacer los cristianos es leer lo que dijo Jesús y luego intentar hacerlo de la misma manera y forma que leemos a Aristóteles y luego intentar ponerlo en práctica. Pues, significa algo mucho más importante que eso.

No se trata de un hombre bueno que murió hace dos mil años, se trata como bien sabemos los cristianos de algo más. 

miércoles, 10 de mayo de 2023

¡¡¡Adelante con el miércoles!!!

 ¡¡¡Buenos días!!!

 Decía ayer que nuestra conciencia nos puede dar diferentes respuestas que nos costarán de seguir, pues puede considerar algunas circunstancias como no malas del todo y que podríamos realizar, pero nos damos cuenta rápidamente que nos cuesta realizarlas si estamos intentando seriamente ser como Cristo. Pues ya no estoy pensando sencillamente en lo que es bueno o malo; estoy intentando ser esa otra Persona.

Aquí no estamos intentando seguir una serie de normas, sino que Algo nos está empujando a convertirnos en ese Algo. El auténtico Hijo de Dios está en nuestro interior, está empezando, por así decirlo, a convertirnos en Él Mismo, está comenzando a convertir una estatua en un hombre vivo.

La parte de mí a la que esto no le gusta es la parte que sigue siendo como una estatua. Ya se algunos de vosotros, ahora, estéis pensando que todo esto no se parece para nada en vuestra propia experiencia. Tal vez estéis diciendo: “Yo jamás he tenido la sensación de ser ayudado por un Jesús invisible, pero muchas veces he sido ayudado por otras personas”. Vale, pero esto sería considerar que Cristo solo actúa dentro de nosotros y no en otras personas. Cristo actúa en nosotros también a través de los demás.

Las personas somos trasmisores para los demás, a veces sin saberlo, trasmitimos lo que sentimos. Cualquier persona nos puede ayudar a llegar al cristianismo, incluso sin serlo, sin embargo, normalmente los que lo son lo trasmiten más. 

No deberíamos de olvidar que es normal que un recién nacido tome la leche de su madre sin conocerla, por lo que es igualmente natural ver al hombre que nos esta haciendo un favor sin ver a Cristo detrás de él.

Pero no debemos permanecer como recién nacidos. Debemos progresar hasta conocer al autentico benefactor. Es una tontería no hacerlo. Porque, si no lo hacemos, estaremos dependiendo de los hombres. Y eso puede no salir bien. 

martes, 9 de mayo de 2023

¡Gracias por este martes!

 ¡¡¡Buenos días!!!


Voy a insistir con el mismo tema de ayer; ¿por qué fingimos? Las personas cuando fingimos lo solemos hacer por dos motivos, uno es malo y otro es un fingimiento de clase buena. El malo es cuando sustituimos a una cosa auténtica para nuestro provecho, por ejemplo: cuando fingimos que vamos a ayudar a alguien y no lo vamos a hacer. Pero también podemos estar fingiendo y que sea bueno, en este caso el fingimiento nos conduce a una cosa buena o real, un ejemplo: no os ha pasado nunca que a veces no os sentís particularmente amigables, pero sabéis que hay que serlo, y lo que hacemos es poner cara de buenos amigos y comportarnos como si estuviéramos a gusto, y en pocos minutos, realmente nos sentimos más amistosos de lo que estábamos al principio.

Y es que muchas veces en la vida la única manera de conseguir una cualidad, en realidad lo que tenemos que hacer es empezar a comportarnos como si ya la tuviéramos.

Pues bien, cuando como cristiano empiezo a rezar el Padre Nuestro y me doy cuenta de que estoy fingiendo ser Jesús, es fácil que rápidamente vea una forma donde el fingimiento tiene menos de fingimiento y más de realidad. Me encuentro con que en mi interior ocurren varias cosas que no me sucederían si realmente fuera hijo de Dios. Pues bien, hay que retenerlas. O tal vez, me dé cuenta de que, debería estar haciendo otras cosas. Pues bien, entonces lo dejo y me voy a hacerlas. Veis lo que me ha sucedido, algo en mi interior me está ayudando a transformar ese fingimiento en realidad.

Esta no es simplemente una manera elaborada de decir que mi conciencia me está diciendo lo que debo hacer. Si le pregunto algo a mi conciencia, sencillamente, obtendré un resultado. Si recuerdo en ese momento que me he disfrazado de Jesús, obtendré otra respuesta.

Hay algunas cuestiones que hay que reflexionar cuando le preguntamos a nuestra conciencia, mañana intentaré aclararme. 

lunes, 8 de mayo de 2023

¡Buen día!

  ¡¡¡Buenos días!!!

Como cristiano muchas veces te encuentras con conceptos que nos resultan interesantes de aclarar, y después de haber reflexionado sobre lo que significa engendrar y crear, y, llegar a la conclusión que lo tenemos claro, de repente te encuentras rezando el Padre Nuestro y te detienes en las primeras palabras y vuelves a tener dudas.

La primera frase es “Padre Nuestro”, ¿os dais cuenta del significado? Lo que estamos haciendo, con toda la buena voluntad es poniéndonos en el lugar de un hijo de Dios. Para decirlo más contundentemente, nos estamos “disfrazando de Cristo”. Estamos fingiendo por decirlo de otra manera. Y es que, en el momento en que me doy cuenta de lo que estoy diciendo, me doy cuenta de que no soy hijo de Dios.

No soy como el Hijo de Dios, que tiene los mismos intereses y voluntades que los del Padre, yo tengo muchos miedos, esperanzas, celos, avaricias y vanidades destinadas a la muerte. Por lo tanto, de alguno forma, es un acto de hipocresía.

Sin embargo, lo más me llama la atención es que Él nos ha ordenado que lo hiciéramos.

¿Por qué? ¿De qué me sirve fingir que soy lo que no soy? Como siempre ocurre con el cristianismo son respuestas que vale la pena, estudiar y responder.   

domingo, 7 de mayo de 2023

¡Feliz domingo!

 ¡¡¡Buenos días!!!

Hay un camino hacia la felicidad que pocas personas exploran, o al menos no me encuentro con muchas, y es ese que nos lleva a acercarnos a las cosas buenas.

Nuestra experiencia y lo que nos cuentan es que todo lo bueno o lo malo se nos contagia si estamos el tiempo suficiente con ellos. Si queremos estar calientes nos acercamos a la estufa; si queremos mojarnos nos acercamos al agua. Si queremos gozo, paz, vida eterna… debemos acercarnos, o incluso introducirnos, en aquello que los tiene.

Si estamos cerca de una gran fuente de belleza y de felicidad, sus salpicaduras nos mojarán, si estamos lejos, vamos a permanecer secos. Una vez que nos hemos mojado, ¿cómo no vamos a ser felices? 

¿Pero cómo vamos a mojarnos?  ¿Cómo es posible para una persona meterse dentro de la fuente?

Si sabemos que “Dios es amor”, ¿cómo nos vamos a mojar?

Hace días comente lo que era engendrar y crear, os acordáis, pues bien, nosotros no somos engendrados por Dios: solo somos creados por Él. Esto es importante. En nuestro estado natural no somos hijos de Dios: solo somos, por así decirlo, estatuas. No poseemos vida espiritual: solo poseemos vida biológica que con el paso del tiempo morirá.

Pues bien, todo lo que ofrece el cristianismo es: que podamos, si dejamos que Dios se salga con la Suya, llegar a compartir la vida de Cristo. Si lo hacemos, estaremos compartiendo una vida que fue engendrada, no creada, que siempre ha existido y que siempre existirá. Jesucristo es el Hijo de Dios.

Veis lo que sucede, si compartimos esta clase de vida nosotros también seremos hijos de Dios. Cada cristiano debe convertirse en un pequeño Cristo. Todo el sentido de hacerse cristiano es ese y ningún otro.