¡Buenos días! Dijo Bilbo. ¿Qué quieres decir? Preguntó Gandalf, ¿Me
deseas un buen día, o quieres decir que es un buen día, lo quiera yo o no; o
que hoy te sientes bien; o que es un día en que conviene ser bueno? -Todo eso a
la vez- dijo Bilbo. (El Hobbit, J.R.R. Tolkien)
Volvemos a tener un fin de
semana complicado, lo que quiero decir es que voy a tener un fin de semana
demasiado intenso, a las ocho tengo que instalar en las pistas todo el equipo
para poder realizar a las nueve el test VAMEVAL, después durante el almuerzo
meter todos los datos en el ordenador y analizar los resultados, al medio día; boda
y a las 10 de la noche cena a la que tengo que llegar en buenas condiciones.
En fin, lamentable lo
complicado que se me presenta el día de hoy cuando lo duro será mañana, pero
eso ya será otra historia.
Pero vayamos “pasito a pasito”,
aunque pueda parecer complicado no lo es, me he dado cuenta que si controlo,
que lo controlo, el consumo de alcohol hoy será un buen día, lo importante es
no querer hacer dos cosas al mismo tiempo.
Si lo pensamos un poco nos
daremos cuenta que el tiempo es una de las pocas cosas que nos iguala a todos,
puesto que es limitado y no recuperable. Todos disponemos de 24 horas diarias, ninguno
de nosotros puede tener ni más, ni menos tiempo, por mucho que quiera añadir o
quitar.
Ni los ricos tienen los días más
largos, ni los pobres tienen menos horas cada día. Pero cada persona lo
administramos de forma diferente. Al final la solución esta en organizar bien el
día a día y el gran secreto a voces para distribuir bien el tiempo y cumplir
las obligaciones, es que las tenemos que tener claras y que sean realistas, bien
programadas y planificadas, pues es la única manera de hacer que el tiempo esté
bajo control, para que no sea él, quien nos produzca estrés, frustración o sensación
de que la falta de tiempo, domina nuestra vida.
En fin, me voy a las pistas.
Feliz y Dulce Día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario