“Lo más increíble de los milagros es que ocurren” (G. K. Chesterton)
Día 48. 14 de julio de 2024.
Rauzan --- Raole.
Distancia: 39,50 km.
Media: 13,33 km/h.
Desnivel positivo: 396 m.
Esta mañana a comenzado un nuevo
viaje dentro del anterior viaje, me he incorporado a la “V80 Canal des 2 Mers à
Vélo”, que me va a llevar hasta el Mediterráneo. Ahora estoy acampado junto al
río Garona que me va ha guiar corriente arriba hasta el canal que lo une con el
Aude que desemboca en el Mediterráneo.
Un viaje dentro de otro viaje,
primero fue llegar hasta la desembocadura del Ródano y seguirlo hasta la altura
del nacimiento del Loira y seguir a este hasta el Atlántico, y ahora, toca
volver al Mediterráneo.
Este viaje transcurre de manera sorprendentemente
creativa, cuando salí de Pego mi intención era otra y la cambie sobre la
marcha, si bien tenia pensada la posibilidad de hacer el Loira lo del “Canal
des 2 Mers” ha salido sobre la marcha, así como volver a casa en bicicleta,
cuando la idea en un principio era terminar en San Sebastián.
La lista de posibilidades es
inabarcable. Cada uno puede empezar su viaje con una intención, lo importante
es dejarse llevar hacia esa meta que tenemos como objetivo final. Mi meta es
idéntica en todos mis viajes, volver a casa.
Cada viaje sigue su ritmo. Y la meta
es fundamental para un viaje. Solo porque tenemos claro la meta podemos tomar
decisiones y ponerlas en práctica. Las dificultades surgen cuando vemos ante
nosotros muchas formas posibles de llegar, o cuando itinerarios parecen buenos
y no lo son, o cuando entre dos s buenos no sabemos cuál sería el mejor.
Más allá de esas y otras
dificultades, cada viajero toma sus decisiones, camina y actúa según lo que
considera bueno para este momento concreto y según estas circunstancias.
Hay errores al decidir un trayecto en
vez de otro. En esos casos, hay que rectificar, corregir las opciones y escoger
otros diferentes.
Otras veces nos equivocamos respecto
de los medios. Suponíamos que con este camino llegaríamos al objetivo de ese día
a meta cuando en realidad el camino estaba lleno de obstáculos realmente
difíciles de superar.
Cada nuevo día pone ante mí una serie
de posibilidades. Y cada día voy eligiendo unas y dejando otras, es así, no tengo
otro sistema.
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