“El hombre no haría nada si esperara hasta que lo pudiera hacer tan bien, que nadie le encontrara defectos.” (John Henry Newman.)
Torrevieja --- Isla
Plana.
Distancia: 83,73
km.
Media: 14,15
km/h.
Altura: 667 m.
Otro día con
demasiados kilómetros, estoy dando muchas vueltas para recorrer todos los
lugares interesantes que me voy encontrando, voy a tener que elegir mejor y no
desviarme tanto. En fin, ya veremos si mañana lo consigo.
He subido el
primer puerto del viaje, ha sido duro por estar en la parte final, aunque tengo
que reconocer que me he encontrado con algunas subidas muy duras, estoy seguro
que si hubiese elegido la carretera hubiesen sido más kilómetros pero con menos
porcentaje, que le vamos a hacer, nos gustan los caminos vecinales y es lo que
pasa.
En realidad
para ser feliz en un viaje no es necesario elegir el camino más “rustico” pues
cualquier carretera comarcal con poco trafico puede ser igual de placentera.
Si lo pensamos
un poco veremos que la Felicidad
es una decisión personal y diaria. Yo decido ser feliz con lo que me haya
tocado vivir. En mis alegrías y mis tristezas. Es más, yo decido ser feliz
minuto a minuto, he decidido no dejar el control de mi felicidad en manos de
terceros. Sin embargo, se puede dar la circunstancia de que mi Felicidad vaya
de la mano con el Éxito de mí viaje.
Lo que sucede es que el Éxito es una palabra que no
significa lo mismo para todos. Cada persona tiene una idea distinta de lo que
es el éxito y lamentablemente existe la idea que el Éxito y la felicidad se
alcanza al final del camino.
Yo creo que el Éxito tiene que ver con los
objetivos y propósitos que nos trazamos. Si solamente tenemos objetivos que
cumplir, el éxito no traerá felicidad. Para que haya felicidad el objetivo
tiene que estar acompañado de un propósito. Algo más grande y trascendental. El
éxito no está al final del camino, el éxito se construye día a día.
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