“La imparcialidad es un nombre pomposo para la
indiferencia, que es un nombre elegante para la ignorancia.” (G. K. Chesterton)
Buenos
Días:
Por
fin hemos llegado al fin de semana y, lo vamos a hacer con la incertidumbre de
no saber si las negras previsiones meteorológicas se van a cumplir, de momento hoy
vamos a ver salir el sol a las 08:16 horas y por todas partes nos dicen que no
vamos a poder disfrutar de la puesta de sol a las 18:06, pero ya veremos pues
en el día de santa Priscila cualquier cosa puede suceder.
Ayer
fue un día con un continuo trasiego, finalizaba la semana y quería empezar el
fin de semana tranquilo, con todos los asuntos pendientes cerrados, y ya por la
noche me preguntaba el porqué de tantos agobios.
Nos
suele suceder, casi sin darnos cuenta, que nos encontramos viviendo con una
tensión similar a la del que no encuentra espacio para respirar o que nuestra
vida queda reducida a un ir tirando cada día sin que nada tenga mayor relevancia,
y es curioso que esto nos suceda cuando hemos olvidado o no sabemos llenar de
contenido humano y espiritual las horas que pasamos en tiempos vacíos, por eso
es bueno que sepamos marcar con una señal todos los acontecimientos que vivimos
y las palabras que pronunciamos a lo largo del día, una señal que nos debe
recordar que el sentimiento de sorpresa ante todo lo que hacemos no nos debe de
abandonar, debemos tener la humildad
de dejarnos sorprender.
Tiene que haber
una llave, tenemos que tenerla, que nos haga darnos cuenta de que detrás de
todo lo que hacemos hay una persona con un corazón. Por eso en el fondo de todo
lo que hacemos y decimos siempre debe estar la posibilidad de descubrir las
múltiples capacidades de las que disponemos para hacer el bien. Y una de esas
capacidades es la ternura.
Hoy, sobre todo,
tenemos necesidad de ternura. Esa que llevamos dentro y que tantas veces
mantenemos oculta para no parecernos a lo que nos avergüenza demostrar que
somos, o quizás nos domina la pereza porque nos resulta más cómodo y no nos
compromete a nada. La ternura nos hace descubrir que en nuestro interior existe
algo que nos hace originales y hace que nos entendamos con el lenguaje del
corazón.
Utilizar siempre
que podamos la ternura significa creer que el amor debe estar en el primer
lugar de todo lo que hacemos, en creer que el dialogo es el mejor camino, en
demostrar que confiamos en la gente, en que buscamos el mejor lugar en el que
construir y crear caminos de entendimiento y esperanza. Entonces, la ternura
podría llegar a ser nuestro más auténtico aliado en esos momentos de vacío y de
agobio.
Feliz Día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario