Domingo.
18 de febrero de 2018.
“En un mundo superior puede ser de otra manera, pero aquí abajo, vivir
es cambiar y ser perfecto es haber cambiado muchas veces”. J.H.N.
Muy bien, vamos a tener que
empezar con una lista para ir de paella, aunque hará falta algo más que una lista
puesto tendremos que ir a comprar los ingredientes.
En este domingo, desde mi
ventana y mirando el termómetro veo que no será un día de mucho frío, ahora 13,3
grados, aunque no veremos mucho el sol supongo.
He estado pensando un poco en
las preguntas que deje en el aire ayer, y creo que ha fracasado el intento de
que nuestra sociedad tenga un “bien común”,
no nos hemos puesto de acuerdo con un estilo de vida a seguir.
Según mi modesta opinión,
seguramente no completamente acertada, es fácil que fuese Nietzsche quien acabó
con todos aquellos valientes intentos por organizar los valores que cimientan por
lo menos mi forma de de entender la vida, cuando dijo: ¿no veis que Dios está
muerto? De alguna manera nos dijo; vuestros esfuerzos por ir al fundamento de
nuestros valores son inútiles, amigos, que cada cual invente sus propios
valores, olvidaos ya de esos valores que sólo provienen del resentimiento
cristiano. Inventaos a vosotros mismos. O sea, haced lo que os venga en gana.
O sea, la voluntad, algo que esencialmente
no es racional, es erigida como principio de moral y síntesis final de toda la
búsqueda de racionalización ilustrada.
Así es como se llega a la conclusión
en que cada cual decida qué es lo bueno, os suena ese tan repetido derecho a
decidir que nos repiten desde el nacionalismo catalán. ¿Os suena, verdad?
En fin, por hoy ya tenemos
bastante que hay que ir a correr a Tabernes de la Valldigna.
Feliz y Dulce Día.
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