“Es algo espantoso soportar la risa de algo a la vez inferior y más fuerte que uno” (G. K. Chesterton)
Sábado 10 de agosto de 2024.
La Réole.
Después de toda la mañana conduciendo
hemos llegado a la Réole, desde donde vamos a comenzar nuestro recorrido del
Canal de Midi hasta Toulouse y volver.
Hace solo unas semanas que hice este
recorrido pero como ya dije ayer, ahora es diferente. Se suele decir que “nunca
segundas partes nunca fueron buenas” y yo creo poder conseguir que al menos en
esta ocasión no lo sea. Veremos.
De momento, esta tarde hemos
realizado una visita turística con las bicicletas para movernos un poco después
de toda la mañana sentados en el coche, algo que la vez anterior no tuve
ocasión. No la tuve porque no soy mucho de visitar monumentos, pero tengo que
reconocer que la importancia del turismo y de sus consecuencias es hoy
innegable.
Hemos paseado por el priorato
benedictino con la bicicleta en la mano, y como suele suceder con las abadías y
los prioratos benedictinos tienen unas bonitas vistas sobre los alrededores,
por cierto la regla benedictina, Regula en latín, da a la ciudad el nombre de
La Réole. Una cosa más, un priorato en la orden benedictina es un monasterio
que tiene prior y que depende de una abadía que tiene abad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario